lunes, 5 de marzo de 2007

Capricho de Dios

Ayer Domingo se celebraba Función Principal de Instituto en tres de mis Hermandades, Dolores, Redención y Cachorro, como es lógico casi a la misma hora. Cuando me coinciden actos no oculto mi preferencia. Mi Hermandad de cuna es El Cachorro, así que tres cuartos de hora antes de la cita ya estabamos en El Patrocinio esperando la convocatoria campanera.


A las doce y treinta minutos salían de "la capilla chica" el sacerdote precedido por los ac

ólitos. Incienso. Motetes de coral. Gran solemnidad. Como siempre. Todo perfecto. Él, majestuoso sobre el fondo burdeos que ha estrenado recientemente. Ella a sus pies, vestida de hebrea. Dos rayos de luz, uno mas fino que otro, entraban por una de las vidrieras de la cúpula y cruzaban la capilla de derecha a izquierda. Cera la justa. Flores las necesarias. Lleno. No se cabía.


A medida que iba avanzando la misa, miraba aquellos dos rayos de luz que entraban desde arriba y que caían a la derecha de altar. Por un momento lo pensé: mira que si le da la luz en la cara.


El el justo momento en el que el sacerdote alzaba el vino para consagrar, El Cachorro tenía la cara y la mano izquierda iluminadas por dos rayos de limpia luz que entraban por las vidrieras.


Pudieron verlo todos los hermanos que allí estabamos. Llámalo capricho, milagro..., tal vez... casualidad?

viernes, 2 de marzo de 2007

PESADILLA

Por lo general no suelo acordarme de lo que sueño (acto de representarse en la fantasía de alguien, mientras duerme, sucesos e imagenes). La mayoría de las veces soy consciente de que he soñado, pero no recuerdo el sueño en concreto.

Las pesadillas (sueños angustiosos y tenaces) las recuerdo algo mejor. Una gracia.

Anoche tuve una. Me levantaba de la cama casi a medio día. Desayunaba un plato de puchero antes de asomarme a la ventana. El día se estaba poniendo gris.
Estaba algo nervioso, intranquilo mejor. Tenía algun tipo de responsabilidad aquella tarde. No llegaba a adivinar de qué se trataba exactamente.
LLegó la hora de darme una ducha larga, y vestirme para salir por la puerta de mi casa. Subí en un coche que no era el mío. El trayecto no fue muy largo, pero me dio tiempo a percibir que la ciudad no era la de siempre. Aquel no era un medio día cualquiera. Me empezaba a incomodar la sensación ensoñada de no saber a dónde iba ni qué pasaba.

LLegamos al destino. Había bastante gente. Mucha de aquellas caras me eran conocidas, otras incluso familiares. Pero ninguna era alegre. Nadie sonreía. Seguía sin saber qué hacía allí. Porque no veía dónde estaba. El espacio físico era borroso y no llegaba a ver ni una pared.
Pero algo me decía que aquel sitio era mío.
Estuve hablando con gente no sé de qué.
Bajé una escalera mientras me cruzaba con mujeres y hombres emocionados. Mujeres y hombres. Algunos lloraban.
Al terminar la escalera me encontré en un espacio abierto. Grande. Abarrotado de personas.
Levanté la cara y pude aclarar mi pesadilla.

Aquel día no era otro que un nuevo Viernes Santo. Llovía en Triana. Otra vez.

Me desperté. Miré el reloj que marcaba las 5:23. "Todavía tengo una hora mas de sueño"

Me di la vuelta y me volví a quedar dormido con la imagen del Cachorro en su paso.


P.D: este año sí quiere.


Y NO VA A CAMBIAR

Hace tiempo que no tenía un ratito para estar relajado y escribir. La cuaresma ha llegado cargada de citas, actos, cultos, y sumado a unos preparativos que tengo pendiente en el mes de Abril, hacen que ande escaso de tiempo ( regalenme tiempo ).

Hoy me apetece escribir sobre alguien a quien seguramente conoces. Prefiero ocultar su nombre por si acaso no le hace gracia lo que opine sobre él, aunque me parece que acepta bien las críticas, algo tiene bueno.

El personaje del que te hablo cuando menos es polémico. Sus palabras, reacciones, gestos, no dejan indiferente a nadie. Esto sin duda le causa problemas que podría evitar con un buen capote, que lo usa bien pero poco. Allá por donde pasa tiene gente totalmente en contra y completamente a favor. No existe termino medio.
Es seco. Serio. Recto. Con un carácter fuerte. Muy fuerte. Visceral. A veces llega a ser malaje. Guasa no le falta. Pero la "gracia" no la conoce. Poco cariñoso y algo "descastao".
A la vez es torpe, iluso, camastrón... una joya vamos!
Parece mayor, tiene sus ideas muy claras, aun así se equivoca constantemente.

Me da mi que a estas alturas de la vida no va a cambiar.
Y para colmo, habla demasiado sobre sí mismo.





Por mas vueltas que le doy, no me queda mas remedio que seguir siendo quien soy.